Consejos para hacer tu casa más acogedora

Hay pequeños detalles que hacen que una casa sea mucho más acogedora. Por ejemplo, los cuadros pueden hacer que una casa se vea mucho más vestida y tenga más personalidad. Las plantas también son un toque muy acogedor en cualquier hogar.

Los pequeños detalles, sin caer en los excesos y en lo recargado, hacen que una casa se diferencie de otra, sobre todo ahora que los pisos tienen todos más o menos la misma estructura y que los muebles que se compran son bastante similares ya que siguen las mismas tendencias.

Aportar personalidad a la casa no es siempre una tarea sencilla, pero es importante lograrlo y por eso hay que invertir tiempo en ello. Pero conseguir que se convierta en un hogar y resulte acogedora es básico, y por eso al elegir la decoración este debe de ser el punto mas importante a tener en cuenta.

Como nosotros nos ocupamos sobre todo de los textiles, vamos a dar algunos consejos respecto a como usarlos para dar un aspecto más acogedor y más de hogar a cualquier habitación, haciendo que volver a casa sea un placer todavía mayor.

Mantas y plaids

Es cierto que las mantas en la cama cada vez se utilizan menos. Han dejado paso a los nórdicos y a las colchas bouti, así como a los edredones. Todos ellos son muy cálidos y mucho menos pesados que las mantas, por lo que estas han quedado prácticamente desterradas.

Sin embargo, las mantas no han desaparecido de casa. Su calidez hace que cualquier estancia resulte mucho más acogedora cuando se ve una manta de por medio y por eso siguen teniendo mucho éxito tanto en la sala de estar como en la habitación.

En la sala de estar, las mantas se colocan en el sofá, ya sea extendidas y dejándose ver al cubrir parte del sofá ya sea dobladas pero decorando también parcialmente. Este año se han puesto especialmente de moda las mantas de pelo, que potencian todavía más la imagen de calidez y que resultan especialmente decorativas.

En la cama, las mantas se llevan a los pies, como una decoración más. Quedan especialmente bien cuando se colocan sobre una colcha blanca, que son tendencia esta temporada, o cualquier otra monocolor, pero también pueden usarse en colchas estampadas.

Las mantas con colores pastel son tendencia esta temporada y le dan a la habitación una sensación mucho más acogedora.

Toallas a juego

Las toallas tienen, desde luego, una función práctica innegable. Pero también tienen una función decorativa. Por eso, los colgadores para las toallas deben de situarse estratégicamente en el cuarto de baño y, una vez que se ha elegido el sitio para ponerlos, debemos de preocuparnos de que las toallas que ocupan estos lugares sean bonitas y aporten a la decoración.

Las toallas a juego siguen siendo la primera opción en la mayoría de los hogares, ya que quedan muy bien y dan una mayor apariencia de orden. Además, en un baño pequeño no tiene sentido jugar con diferentes colores, por lo que usar toallas que sean iguales es lo más apropiado.

No es necesario que tengan un estampado o una marca determinada, pueden ser toallas lisas, pero lo importante es que todas sean de un mismo color para que haya uniformidad en el conjunto, haciendo así que el cuarto de baño tenga una apariencia mucho más acogedora.

Si además se coloca una estantería abierta en la que se pueden ver los diferentes juegos de toallas y también las toallas sueltas para las manos, el aspecto del baño será mucho más agradable y resultará muy práctico para que todo aquel que lo use encuentre siempre una toalla apropiada a mano.

Manteles decorados

Las prisas y el evitar planchar hacen que en muchas casas los manteles hayan desaparecido de las cocinas y de los comedores, al menos para el día a día. Los hules plastificados que se limpian pasando un paño húmedo son mucho más cómodos y no hay que lavarlos ni plancharlos para que se vean impecables.

Pero el toque que un mantel le da a una mesa no se puede sustituir por este tipo de plásticos que, además, no suelen tener una gran variedad de diseños. Hoy, podemos encontrar manteles antimanchas que también se limpian con gran facilidad, pero que tienen la apariencia y el tacto de los manteles de tela que le dan al comedor ese toque especial.

También pueden usarse en la cocina, para el día a día, reservando para días especiales los manteles de hilo que son mucho más delicados. Desde luego, si se busca un comedor o una cocina acogedores, el mantel no puede faltar en la mesa. Si además se utilizan servilletas a juego, el resultado es todavía más hogareño.